Estudio retrospectivo (2010-2017) de las dermatofitosis diagnosticadas en el servicio de diagnóstico bacteriológico y micológico de la cátedra de microbiología (FCV/UNNE)
Fecha
2017Autor
Paredes, M. S.
Mendez Galarza, S.
Ramírez, Gabriela Verónica
Boehringer, Silvia Irene
Metadatos
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Los hongos son organismos eucariotas sin clorofila, de metabolismo heterótrofo, absortivos, uni o pluricelulares, micro o macroscópicos, de paredes quitinosas, que se reproducen por esporas sexuales o asexuales y en general inmóviles. Toda enfermedad producida por un hongo se denomina micosis y, según el tejido que parasitan pueden ser superficiales o profundas. Las micosis superficiales, denominadas dermatofitosis (o tiñas) son producidas por hongos que reciben el nombre de dermatofitos, los cuales poseen una actividad queratinofílica que les permite invadir el estrato córneo de la piel, pelo, uñas y cuernos, ya que degradan y usan la queratina como fuente de nitrógeno. Según su hábitat, los dermatofitos se clasifican en antropofílicos, zoofílicos y geofílicos. Dentro de los géneros de importancia veterinaria se encuentran Trichophyton y M icrosporum . La transmisión de la enfermedad se puede producir de animal a animal, del animal al humano, entre humanos y desde el suelo a los animales y al hombre. Los felinos representan el principal reservorio de dermatofitos y, junto a los caninos, poseen un rol importante en la epidemiologia de los mismos, ya que constituyen una fuente primaria y directa de transmisión zoonótica. El objetivo del trabajo fue determinar la incidencia de dermatofitos aislados en el Laboratorio de Diagnóstico Bacteriológico y Micológico de la Cátedra de Microbiología (FCV/UNNE) en un período de 10 años, comprendido desde julio de 2010 a julio de 2017. Para ello, se realizó la revisión de los registros de protocolos del laboratorio, teniéndose en cuenta las siguientes variables: especie afectada, mes en la que se realizó la toma de muestra y resultado del aislamiento. Sólo se tomaron en cuenta los dermatofitos aislados por cultivo. Además, se tuvieron en cuenta otros hongos aislados, como levaduras (M alassezia sp. y Candida sp.) y diagnósticos que no correspondieron a hongos, como ser parásitos y bacterias. Se evaluaron un total de 154 registros, de los cuales 76 correspondieron a hongos (26 aislamientos de dermatofitos y 50 de levaduras), 43 a bacterias y 35 a parásitos. Con respecto a los dermatofitos, representan el 34,21% de los hongos aislados y el 16,88% de los casos registrados en el laboratorio. M icrosporum canis fue la especie más aislada (84,61%), seguido por Trichophyton verrucosum y M icrosporum gypseum con un 7,69% cada uno. Los caninos representaron la especie más afectada, seguido de los felinos. Con respecto a la época del año, la mayoría de los aislamientos se correspondieron a los meses de verano y en menor número, al otoño. Dichos resultados confirman la importancia de la toma de muestras y su remisión al laboratorio, en primer lugar para confirmar el diagnóstico de micosis, debido a que existen otros agentes etiológicos que pueden producir lesiones similares. Por otra parte, realizar el diagnóstico a través del cultivo y aislamiento de dermatofitos permite establecer las correctas medidas de tratamiento y control, tanto sobre el animal y sobre el medio ambiente en donde vive.