Libroshttp://repositorio.unne.edu.ar/handle/123456789/1152024-03-19T11:54:05Z2024-03-19T11:54:05ZMáquinas hidráulicasPérez Farrás, LuisPilar, Jorge Víctorhttp://repositorio.unne.edu.ar/handle/123456789/511572024-02-22T13:13:16Z2022-08-01T00:00:00ZMáquinas hidráulicas
Pérez Farrás, Luis; Pilar, Jorge Víctor
Las máquinas hidráulicas pertenecen al grupo de las de fluido, que son aquellas en las que el fluido, o bien proporciona la energía que absorbe la máquina, o es el receptor de la energía que la misma restituye. Esta definición aclara el hecho de que casi todas las máquinas tienen fluidos actuantes (refrigerantes, lubricantes, etc.) pero solo consideramos como máquinas de fluido, a aquellas en que el mismo es quien proporciona o recibe la energía puesta en juego. Las máquinas de fluido revisten distintas formas, y encuentran muchas y variadas aplicaciones en la técnica. Encontraremos máquinas tan dispares como las enormes turbinas de Asuán o Yacyretá y las pequeñas turbinas de los odontólogos, las bombas de nafta de los automóviles antiguos y en otra escala mucho mayor, los motores cohetes actuales, transporte de vehículos espaciales, con su gran cantidad de variantes y poseedores de enorme potencia. A su vez, el vasto campo de las máquinas de fluido se subdivide en máquinas térmicas y máquinas hidráulicas. Definimos como máquinas hidráulicas a aquellas en la que el fluido, en su paso a través de la máquina, no cambia su masa específica. Por su parte, una máquina térmica es aquella en la que el fluido sí cambia su masa específica o, lo que es lo mismo, el volumen específico, que es su inverso. Estas definiciones ilustran sobre algunos conceptos que pueden parecer erróneos en un análisis superficial. Por ejemplo, la turbina de vapor trabaja con agua y no es una máquina hidráulica tal como la etimología podría hacer pensar. En forma similar, un ventilador, a pesar de impulsar gases, constituye en esencia una “bomba de aire”, es decir una máquina hidráulica.
2022-08-01T00:00:00ZInstrumentos de control y gestión ambientalBasterra, Nora IndianaBáez, Lilia Marcelahttp://repositorio.unne.edu.ar/handle/123456789/506182022-11-25T21:40:26Z2008-01-01T00:00:00ZInstrumentos de control y gestión ambiental
Basterra, Nora Indiana; Báez, Lilia Marcela
Una gestión ambiental debe contar con instrumentos que permitan un manejo que permita responder a las problemáticas e inquietudes que se presenten . Mediante el uso de instrumentos de gestión, se persigue consolidar las condiciones ambientales a través de normas de calidad ambiental, procesos de prevención ante nuevos proyectos que incluyan las evaluaciones de impacto ambiental, la concientización y la educación ambiental de los ciudadanos, valoración económica del ambiente.
2008-01-01T00:00:00ZInformación ambientalBasterra, Nora Indianahttp://repositorio.unne.edu.ar/handle/123456789/506172023-07-07T19:55:24Z2008-01-01T00:00:00ZInformación ambiental
Basterra, Nora Indiana
La aparición de los Sistemas de Información Geográfica (SIG), es el resultado de dos tendencias tecnológicas desarrolladas desde la mitad del siglo, con el propósito de agilizar la ejecución de las investigaciones sistémicas, donde la componente espacial pasa a ser un punto relevante en los análisis
2008-01-01T00:00:00ZReflexiones sobre el Chaco, sus aguas y su gentePilar, Jorge Víctorhttp://repositorio.unne.edu.ar/handle/123456789/499882022-08-29T15:07:56Z2000-01-01T00:00:00ZReflexiones sobre el Chaco, sus aguas y su gente
Pilar, Jorge Víctor
Una madrugada, luego de haber terminado de preparar una monografía para una revista de Ingeniería, me surgió de repente la necesidad de volcar en un papel la visión que tenía como chaqueño de nuestros recursos hídricos, sus problemas y mi análisis personal sobre los mismos. Estaba en Porto Alegre (Brasil), lejos del Chaco, donde hacía un par de meses había defendido mi tesis de maestría en Ingeniería, después de dos años y medio de estudios en el Instituto de Pesquisas Hidráulicas de la Universidade Federal do Rio Grande do Sul. Sentí de pronto una enorme necesidad de comunicarme con ese chaqueño común, que tanto había aportado para que yo tuviera una educación primaria y secundaria gratuita, una carrera universitaria también gratis y la beca que me permitió realizar mi maestría. Debía comenzar a devolver al pueblo (algo de) lo que el pueblo me había dado. Yo era (y aún soy) docente de la Facultad de Ingeniería de la UNNE y esa fue una buena oportunidad para meditar sobre la función social de la educación universitaria. Me di cuenta que tal vez ella no era formativa, ni tampoco meramente informativa. Percibí que la actividad docente no finaliza una vez que acabó la clase. El docente universitario tiene también la responsabilidad, entre otras, de encender y mantener encendidos los debates sobre los temas importantes para la sociedad. Debe crear conciencia con ciencia. Con estas convicciones comencé a escribir estas dos docenas de artículos, que fueron publicados por el Diario Norte, de Resistencia y que reflejaron mi opinión personal de nuestro Chaco, sus aguas y su gente. Sé que varias personas (no me atrevería afirmar que fueron muchas) los leyeron. Algunos coincidieron con mis puntos de vista...; otros, posiblemente no. En todo caso, el objetivo de instalar un debate en la sociedad, aunque sea en forma incipiente, se había cumplido. Los artículos trataron sobre temas tan cotidianos como las aguas, las lluvias y sus consecuencias. Todos y cada uno de ellos fueron muy meditados y escritos desde la razón y con el corazón, pero siempre honesta y sinceramente.
2000-01-01T00:00:00Z